4 de febrero de 2011

Libros: "El Silencio del Bosque" ("In The Woods")

En “The Strike Blog” siempre he echado en falta hablar de comics y libros. A lo primero espero ponerle remedio en breve (esta vez, de verdad), y a lo segundo se lo pongo ahora mismo inaugurando sección con la primera crítica literaria del blog, El Silencio del Bosque

Sin embargo, doy un paso atrás para ceder el protagonismo: siempre buscando ofrecer lo mejor a mis amados seis lectores, he decidido dejar no solo esta reseña sino la gestión general de la sección de libros en las expertas manos de Cosette, ávida lectora y, sin duda, la persona adecuada para encargarse de ella. Analítica pero pasional, directa, ecléctica y, a veces ―cuando más me gusta―, controvertida; a partir de ahora la leeréis a menudo y podréis beneficiaros de sus recomendaciones (o sus críticas). Ah, no ha habido enchufe, que conste; sin la calidad que la respalda le daba puerta como a cualquier otro… ;p

¡Bienvenida, Cos, y al toro!

El Silencio del Bosque
por Cosette

El Silencio del Bosque (In the Woods. RBA, 2010) es la primera y ampliamente galardonada novela de Tana French. Esta autora, norteamericana de nacimiento pero irlandesa de adopción, dejó pasmados a crítica y público con su debut literario en 2007 y, actualmente, con solo tres (excelentes) novelas en el mercado, está considerada como una de las escritoras de género negro más prometedoras. French posee un talento especial para conjurar una imaginería poderosamente bella y evocadora, y construir personajes dotados de una gracia y encanto poco habituales. Me atrevería a afirmar que El Silencio del Bosque forma parte del selecto grupo de obras que ejercen un permanente enganche en el lector y perviven en nuestra memoria largo tiempo después de pasar la última página. Y es que este atípico thriller, un ejercicio literario preciosista en la forma y valiente en el fondo, es uno de los mejores libros que he leído recientemente.

La acción de la novela se sitúa en Irlanda en el año 2004, pero nos remite a los acontecimientos acaecidos una tarde de agosto de 1984, cuando tres niños de 12 años se adentran en el bosque de Knocknaree, en las afueras de Dublín, y desaparecen misteriosamente sin dejar rastro. Esa misma noche la policía encuentra a uno de ellos, Adam Robert Ryan, abrazado a un roble, recubierto de sangre y en estado catatónico. Veinte años después, Adam Ryan, quien ahora se hace llamar por su segundo nombre, Rob, es detective de Homicidios y sigue guardando con celo aquella tragedia de infancia: aunque es incapaz de recordar nada de lo acontecido aquel día, lleva una vida aparentemente normal y feliz. Todo cambiará cuando una mañana de finales de verano aparezca el cuerpo de una niña asesinada en el mismo bosque. Ryan y la detective Cassie Maddox su compañera, mejor amiga y una de las pocas personas que conoce su verdadera identidad, serán los encargados de resolver un caso que se convertirá en un veneno silencioso y letal, una pesadilla que amenazará con destruirlos a ambos.

Se me antoja que calificar El Silencio del Bosque de novela policiaca al uso es prácticamente un insulto ya que, a pesar de que podamos enmarcar esta obra en dicho género, la ópera prima de French explora magistralmente territorios que van más allá de los típicos clichés de la novela negra. La subyugante prosa de esta autora ­(si tenéis soltura con el idioma os recomiendo encarecidamente leer la novela en su inglés original, es una delicia) nos adentra en un misterio tenebroso, seductor y fascinante; y no por la naturaleza del caso en sí ―aquí no hay asesinos en serie de primer orden, ni el típico tipo normalito e introvertido que guarda órganos humanos en su Tupperware; por no haber, ni siquiera hay la ineludible persecución con tiroteo incluido―. El caso al que se enfrentan Rob y Cassie no tiene nada en particular: se trata de una pobre niña asesinada y abandonada en las entrañas de un bosque. Sin embargo, la inquietante posibilidad de que este homicidio esté relacionado con los sucesos de hace 20 años hará tambalear de forma lenta pero inexorable la cordura de Rob y pondrá a prueba la inquebrantable amistad con su compañera. Y es que el bosque que figura en el título no solo se refiere a la escena de ambos crímenes, sino a los recovecos de nuestra memoria, a nuestros miedos e inseguridades, a esa maraña de sentimientos oscuros y contradictorios que tejen un follaje tan denso e impenetrable que no nos permiten ver el cielo azul ni encontrar el camino de regreso a casa.

Si bien no voy a negar que la parte estrictamente procedimental de la novela puede resultar cuestionable en algunos aspectos, una de las grandes bazas de esta obra son las excelentes caracterizaciones y el innegable carisma de sus personajes ―especialmente de la joven pareja protagonista, los detectives Ryan y Maddox―. La novela está narrada en primera persona por Ryan, quien nos abre las puertas a su historia, sus percepciones y sentimientos.

Te lo advierto, recuerda siempre que soy detective. Nuestra relación con la verdad, aunque primordial, es fragmentada, confusa y refracta la luz como trozos de cristal […] Anhelo la verdad. Y miento.

Con estas palabras Rob se presenta al lector, y a este le corresponde decidir si alguien que corteja la verdad como a una amante pero que no tiene escrúpulos en traicionarla para poseerla en cuerpo y alma es digno de nuestra confianza. Rob difícilmente encaja con el estereotipo de detective que ha forjado nuestro imaginario colectivo; inteligente e introspectivo, cínico y romántico a partes iguales, divertido a ratos e increíblemente frustrante a otros, es un personaje ambiguo e imperfecto ―pero con el que no puedes evitar simpatizar al contemplar como su vida se desintegra poco a poco―. Cassie es su partenaire inseparable, su alma gemela y mejor amiga y, probablemente, el personaje con más chispa y gracia del libro. Rebelde y algo gamberra, valiente, leal y deslumbrante ―y con una historia personal que nos irá ofreciendo múltiples sorpresas a lo largo del relato―, es un soplo de aire fresco en la vida de Rob y en la atmósfera perturbadora y sofocante de la novela (y no, por si os lo preguntabais, Cassie no se parece en nada a Lisbeth Salander).

Tana French, autora de El Silencio del Bosque (In The Woods)
Si bien Ryan y Maddox resultan fascinantes por separado, es en cada una de sus innumerables interacciones ―en sus bromas y diálogos chispeantes, en sus charlas nocturnas e interminables amodorrados en el sofá del apartamento de Cassie, en la belleza esplendorosa y cruel de sus interrogatorios a dos―, en los que brillan con una química vertiginosa y arrolladora. Ni qué decir tiene que esta amistad perfecta y sólida como un muro de piedra no está exenta de aristas y grietas invisibles, y que nos veremos obligados a plantearnos una y otra vez la eterna cuestión de si una mujer y un hombre heterosexuales pueden ser solamente amigos. Sea cual sea la respuesta (y la hay), lo cierto es que algunos de los fragmentos más hermosos y emotivos de la novela son aquellos en los que Rob describe su especial relación con Cassie; he aquí uno de mis favoritos:

Las chicas con las que sueño son las tiernas y nostálgicas, las que cantan dulces canciones al piano o junto a grandes ventanales, de pelo largo y ondulante y delicadas como flores de manzano. Pero una chica que entra en la batalla a tu lado y te guarda las espaldas es otra cosa, es algo que te hace estremecer. Uno puede acordarse de la primera vez que se acostó con alguien o de la primera vez que se enamoró: esa explosión cegadora que te electrifica hasta las yemas de los dedos y te transforma como una iniciación. Juro que eso no es nada, nada de nada, comparado con el hecho de poner tu vida, sencilla y diariamente, en las manos del otro.

A estas alturas, creo que cualquier otra cosa que pueda añadir sobre El Silencio del Bosque palidece ante la gracia y destreza con la que Tana French teje el universo de Rob y de Cassie. Sin embargo, no os dejéis engañar por mi entusiasmo: esta novela dista mucho de ser una obra perfecta. Me atrevería a argumentar que es una lectura para paladares sofisticados ―y con ello no quiero dármelas de snob o elitista, pero si estás buscando un thriller al uso, ligerito y con un final para todos los públicos, mejor olvídate de este libro―. 

No os voy a mentir: esta es una novela difícil y deliberadamente decepcionante; frustrante y cruel tanto en el fondo como en la forma. Iría tan lejos como para afirmar que es insatisfactoria y anticlimática en la resolución de todos y cada uno de los frentes que aborda. Sin embargo, es quizás esta cualidad la que le confiere una belleza imposiblemente conmovedora. Épica, incluso. Me atrevería a afirmar que esta historia es una alegoría de la complejidad y el enigma que envuelven a las relaciones humanas, una exploración poética de la amistad y el amor, de la verdad y la mentira, de la semilla del miedo que impide a las personas llevar una vida plena. ¿Qué decir? Adoro este libro, pero no me atrevo a revelar más. Lo mejor es que lo leáis y saquéis vuestras propias conclusiones.

pd: a modo de curiosidad, JM ha utilizado hace poco In The Woods como base para un trabajo de adaptación cinematográfica. Tal vez tengáis curiosidad por ver a quién ha elegido para interpretar a Rob y a Cassie… ;)

5 comentarios:

JM dijo...

¡Hola, Cos!

Debo de ser el único ser humano no virtual que conoces y que, además (redoble de tambores)… se ha leído este libro ;p Si hacer series-rec o film-rec es a veces una tarea solitaria, no te digo ya hacer book-rec.... Te compadezco y te admiro, aunque también creo ―¿sé?― que este tipo de trabajo nunca cae del todo en saco roto (si no, no mantendría un blog ;>). ¡Ánimo con la sección!

Al tema: ¡In The Woods!
"Sin embargo, no os dejéis engañar por mi entusiasmo: esta novela dista mucho de ser una obra perfecta."
En efecto, dista bastante...;p Como bien sabes, mi devoción por este libro es algo más limitada que la tuya. A nivel personal, tengo tres problemas principales con él: los temas en los que profundiza no me tocan la fibra ―como ambos sabemos, soy un insensible ;p―; creo que el elemento sobrenatural, por leve que sea, debería estar tratado con mayor cuidado; y, por último, se estira un poco en la parte central ―aunque comprendo por qué lo hace y, en el fondo, respaldo la decisión―.

Y hasta aquí llega toda la crítica que puedo hacerle pues, objetivamente, nadie en su sano juicio puede sino rendirse ante la magnífica prosa de Tana French y su excelente estudio de personajes (Robert Ryan y Cassie Maddox), amén de que esos temas que a mí no me llegan como debería sé que a muchos (muchísimos) otros, sí. Es más, su controvertido final en todos los frentes es una de las cosas que más me gusta del libro. Si tuviera que puntuar In The Woods, supongo que mi corazón le daría un 7 y mi cabeza, un 8 u 8,5. Dicho en otras palabras: también recomiendo su lectura ;>

Anticipo en primicia o a los lectores de "The Strike Blog" que, si bien esta crítica ha sido muy positiva, en la siguiente tal vez Cosette ponga de vuelta y media a cierta saga adolescente muy de moda desde hace algún tiempo que, sorpresa, no es CRAPúsculo (lástima ;p). Estad bien atentos ;>

¡Saludos!

Cosette dijo...

@JM.

Debo de ser el único ser humano no virtual que conoces y que, además (redoble de tambores)… se ha leído este libro
Jeeee. Bueno, creo que no es precisamente un libro desconocido, que por algo ha ganado tropecientos mil premios… Pero bueno, está claro que no es el típico best seller que te colocan en la entrada de la sección de libros de la FNAC y te “obligan” a leer (sí, La caída de los gigantes, me refiero a ti). Eso sí, si te gusta la novela negra creo que es una lectura obligatoria (aunque solo sea porque la Sra. Tana se carga sin problemas unos cuantos convencionalismos del género).

los temas en los que profundiza no me tocan la fibra
Sí, ya sabemos que a ti lo único que te “toca” es el bromance y los conflictos paterno-filiales… xDD Bueno, en mi caso no te voy a negar que este libro me gusta tantísimo porque recoge varios de mis fetiches literarios; en primer lugar, tenemos una prosa cuidadísima y casi poética en algunos momentos, un protagonista emo... digo, introspección psicológica a saco, y la eterna pregunta de si un hombre y una mujer pueden ser amigos íntimos y permanecer así (mi fetiche Nº 1 cuando está tratado con sutileza y realismo –como aquí!). Y bueno, luego tenemos toda la parte de la investigación, que a mí personalmente me gusta bastante.

el elemento sobrenatural, por leve que sea, debería estar tratado con mayor cuidado;
Ahí ya sabes que opinamos igual. La última escena del libro me encantó, pero es cierto que el elemento sobrenatural no está bien llevado. Creo que entiendo lo que pretendía la autora (y más teniendo en cuenta que el libro transcurre en la mística Irlanda), pero creo que este aspecto no está lo suficientemente bien desarrollado –además, la novela es demasiado realista, y este elemento como que no acaba de encajar--.

su excelente estudio de personajes (Robert Ryan y Cassie Maddox)
Seriously? Ya sé que Cassie te gusta (a quien no?), pero a mí no me engañas, al pobrecito Rob sueno-como-una-chica no lo puedes ni tragar. Sigh. Con lo interesante que es (e inteligente, e irónico, y sensible!), y torturado que está. Y respecto a lo de esos temas que a ti no te “llegan”, pues qué quieres que te diga, es lo mejor de la novela.

Es más, su controvertido final en todos los frentes es una de las cosas que más me gusta del libro.
No voy a spoilear, pero totalmente de acuerdo. El final es muy duro, pero no creo que pudiera acabar de otra manera. Cualquier otra cosa habría parecido facilona y gratuita; además, finales como este son los que hacen que no puedas sacarte un libro de la cabeza… Y ya sé que parezco una masoquista, pero la verdad es que a mí me pareció satisfactorio y redentivo --la última no-escena entre Rob y Cassie es perfecta (“I touched her hair, once” incluido. Pero-qué-bonito-por-Dios, cómo-no-voy-a-perdonarte-por-ser-un-capullo? ;P). Además, a mí el tono del final me pareció esperanzador (interpretación sui generis, lo sé), pero entre eso y que Tana French sigue diciendo que piensa retomar a Rob en un futuro no muy lejano (ya sabes, “sticking to love and second chances” ;)).

un 8 u 8,5
JAJA. Come on, babe!

de vuelta y media a cierta saga adolescente muy de moda desde hace algún tiempo que, sorpresa, no es CRAPúsculo
Con CRAPusculo no me voy a meter, que la cosa ya aburre… Y matizo, aún no tengo claro que vaya a postear sobre Los juegos del hambre (me apetece más Mo Hayder o Tokyo Blues, o incluso los tres primeros de la serie de Kenzie/Gennaro), pero que conste que no voy a poner a la saga de vuelta y media… A mí no me parece tan fantástica como a otra gente (ni me convence su nivel de escritura, ni la forma que tiene Collins de abordar algunas tramas, ni lo que acaba haciendo con sus personajes –especialmente Katniss--), pero no negaré que tiene algunas cosas buenas –pero bueno, ya sabes que a mí el Young Adult me parece un género un tanto ridículo--. Ya veremos lo que sale… ;)

Anónimo dijo...

Parece ser que hay algun otro se sobre la faz de la tierra qué ha leído este libro.
Sinceramente me ha gustado mucho, lógicamente no es una novela policiaca tradicional (para ello prefiero mil veces al inspector Wallander de Mankell) pero tiene un argumento muy interesante, unos personajes muy elaborados y alguna que otra sorpresa, como el final.
O sea que si quereis leer algo diferente y que os enganche, en este libro seguramente lo encontrareis.

Hattori Hanzo

Cosette dijo...

@Hattori

¡No sabes lo que me alegra que te haya gustado! No estábamos seguros cuando decidimos regalártelo, especialmente porque eres un fan de la novela negra clásica, y esta, en el fondo, es más un estudio psicológico de personajes que otra cosa (y el final es tan controvertido que da miedo recomendarlo y todo!).

Por cierto, JM ya me contó que tú no eres de esos seres humanos insensibles (como él xD) que odian al pobre Rob Ryan… Personalmente lo encontré un personaje muy interesante y ando (medio) platónicamente enamorada de él xDD; creo que la exploración de su trauma y el impacto de este en su vida adulta están realmente logrados y bien llevados desde un punto de vista psicológico… Él y Cassie son sin duda lo mejor del libro --aunque realista, me supo muy mal lo que le pasa a su relación. Sniff. Espero que, con un poco de suerte, la Sra. Tana retomará a Rob en otro libro –como ha prometido— y le dará al chaval un final un poco más feliz…

Por cierto, si te ha gustado la prosa de esta autora, acaba de salir en castellano su segundo libro, “En piel ajena” (“The Likeness” en original). Si logras superar la premisa (totalmente surrealista), la novela está muy bien: está situada 6 meses después de “In the Woods” y la protagonista es Cassie –no es una continuación, pero está relacionada de una manera sutil pero muy significativa con él-. A mi parecer no es un libro tan redondo como su predecesor (aunque, extrañamente, a la gente suele gustarle más), pero es también muy recomendable :).

JM dijo...

Con esta van tres, Hattori, a ver si te conviertes en el séptimo lector oficial del blog ;>

Yo también me alegro de que te gustara (¿por qué me llueven capones por todas partes?;p). A veces regalar libros es… bueno, a cada cual le gusta lo que le gusta y no siempre es fácil acertar. Tana French tiene intención de retomar a Rob en un futuro, así que tal vez te interese estar al tanto. Por el momento, en castellano puedes probar suerte con En piel ajena: esta no la he leído pero, por lo que me ha comentado Cosette, si eres capaz de aceptar su total y absolutamente ridículo punto de partida, capaz de dejar en pañales a la mismísima Cara a Cara (la de John Woo, Cage y Travolta, sí ;p), parece ser una novela que trata temas interesantes, en consonancia con lo tratado en El Silencio del Bosque (identidad y demás).

Ah, por cierto, ¿sabías que el personaje de Wallander ha sido adaptado en serie de TV por la BBC? Son seis capítulos, y el actor que le da vida es Kenneth Branagh. Es fácil de encontrar en Fnac o en El Corte Inglés… y en otros sitios también ^_^

¡Saludos!